El Senado Académico tiene dos funciones principales:

  • Ocuparse de la normas de calidad académica de la Institución a través de la aprobación de Resoluciones Normativas
  • Asesorar al Rector en torno a la política educativa, administrativa y de investigación a través de la aprobación de Resoluciones Asesoras.

Para atender adecuadamente la primera de estas funciones, el Senado propone normas académicas, requisitos de graduación y normas para la creación y cambios de cursos y programas académicos. De la misma manera, propone las normas relacionadas con la facultad y los estudiantes que se recogen en el Manual de la Facultad y en el Reglamento General de Estudiantes, respectivamente.

Con el objetivo de cumplir con la segunda función, el Senado Académico recomienda acciones al Rector en torno a varios asuntos tales como: prioridades presupuestarias, planificación general del Recinto y establecimiento y disolución de dependencias académicas. Igualmente, elabora recomendaciones en torno a afiliaciones de la Institución a organizaciones y programas especiales. Otra labor asesora está relacionada con asuntos que afectan a la facultad. De esta manera, el Senado hace recomendaciones sobre reglamentaciones, especialmente las relacionadas con la igualdad de oportunidades. Por virtud de la función académica del Senado, este cuerpo incide en la elaboración de recomendaciones sobre el funcionamiento de los Centros de Recursos Educativos.